EL ENCUENTRO ENTRE LA ARQUITECTURA DE INTERIORES Y LAS EMOCIONES
El "leit motiv" de la decoración es siempre despertar las emociones, a veces se usa para sorprender, para agradar, para comunicar...pero siempre es utilizada como vehículo para transmitir o provocar alguna reacción en el "espectador", ya sea consciente o inconscientemente.
¿De qué hablamos cuando nos referimos a decoración emocional?
La decoración emocional nace en los 90 como respuesta al Minimalísmo, al Neobarroco y otros tantos estilos decorativos que basan su decoración en elementos creados en serie. Esta corriente deco huye de la industrialización del diseño, y se centra en crear espacios mucho más personales.
Recientemente tuve la ocasión de asistir a una charla organizada por Monapart en la última edicición del Alicante Market Design en la que intervino mi amiga y colega de profesión Paloma Amo, dando una breve pero genial conferencia sobre el tema, y en la que aportó su interesante forma de entender la decoración. Sigo y comparto esta forma de ver nuestra profesión como vehículo para mejorar la vida de nuestros clientes.
Los que me conocéis habréis notado que de unos años aquí vengo haciendo bastante uso del término, y que incluso lo he añadido subrayando mi logo o acompañando mi nombre. Esto es porque desde unos años me dedico casi en exclusiva al interiorismo residencial. Así que me he especializado en el diseño de interiores de viviendas particulares y trato de hacerlo siempre desde este punto de vista "emocional", en otras palabras, ayudo a mis clientes a crear sus hogares a medida.
Convertir una casa en un hogar supone crear un "refugio". Nuestra casa debe ser el espacio que nos inspira, que nos relaja, que nos mima el alma, pero para conseguirlo tiene que estar diseñado a nuestra medida.
Lo maravilloso de la decoración es que la primera regla es que no hay reglas (en cierto modo, claro😬). Al igual que pasa en la moda, en la decoración, lo que a unas personas les va bien, les favorece, a otras les horroriza o les sienta mal, y es aquí donde la decoración emocional despliega todos sus encantos para cubrir nuestras necesidades específicas, únicas e intransferibles.
Una parte que considero esencial en mi trabajo y de la que depende en gran medida el éxito del proyecto es el cuestionario de necesidades que hago a mis clientes, y gracias al que descubro cómo viven, cómo les gustaría vivir y qué esperan de su casa (siempre en cuestiones decorativas). A partir de aquí empiezan a surgir las primeras ideas de distribución. Por ejemplo, no es lo mismo diseñar para una pareja que para una familia, y cada familia además es distinta.
Las mejores reuniones que auguran éxitos son a las que acude toda la familia. Normalmente ellos salen peleados de estas reuniones, no os voy a engañar😂😂...pero es solo porque cada uno quiere una cosa o tiene su estilo, y así, a bote pronto, no ven cómo se puede conjugar todo en un mismo proyecto...
Superada la primera fase y con todas las expectativas puestas en la segunda es cuando se produce el milagro...¡llegó la hora de presentar el proyecto! Aquí es donde cada uno ve lo que deseaba adaptado a su espacio, es cuando el cliente siente el flechazo con su casa. En esta fase trato de proveerles de la mayor información posible, acompañando el proyecto de perspectivas 3D , de muestras de colores, de texturas, les animo a tocarlo todo, a sentir las formas del mobiliario y a que perciban la luz que recibirá el espacio, a que sean consciente de que hay un lugar para cada cosa y que cada cosa tiene su lugar, porque al final, este conjunto de sensaciones es lo que hace que sintamos bienestar, paz e incluso alegría cuando estamos en casa.
Nuestro cuerpo es un centro receptivo, y todos los estímulos que recibimos nos afectan.
Ya sea por el estrés al que estamos sometidos o por los ideales de superación que tenemos en la actualidad, lo cierto es que en las últimas décadas las enfermedades de tipo psicológico están a la cabeza en el ranking de las más comunes. El interiorismo emocional se postula como una especie de tratamiento en este sentido.
En definitiva, en la decoración emocional tratamos los espacios conscientemente y todo está pensado y planificado para mejorar tu vida.
Para ilustrar el post no voy a poner interiores, ya que como he dicho antes cada uno tenemos un estilo y lo que a mí se me presenta como un espacio placentero a otro le puede parecer diferente. Lo mejor para acompañar mi post son las ilustraciones de Pascal Campion que que con su inmenso talento refleja como nadie la cotidianidad de los diferentes hogares.